
Hoy hablaremos sobre el concepto ALIMENTO.
Se habla mucho de los alimentos ultraprocesados y lo poco saludables que son. ¿Sabéis qué son? No os lo perdáis al final del artículo.
Qué es un alimento
De forma breve y sencilla podemos decir que un alimento es un contenedor, porque contiene los nutrientes y las sustancias beneficiosas que nuestro cuerpo necesita para funcionar, crecer y mantenerse en salud.
Con sus colores, olores, texturas… activan nuestros sentidos para que nos apetezca comerlos y así, obtener de ellos todo lo que tienen para ofrecernos, y que es lo que realmente, al final, buscamos en el acto de alimentarnos.
Siendo un poco más académicos, decimos que un alimento es cualquier sustancia o producto destinado a ser ingerido por los humanos, y que contiene energía y compuestos químicos indispensables para el correcto funcionamiento y regulación del cuerpo.
Los alimentos se pueden clasificar según su origen, si son vegetales, animales o incluso minerales, como es el caso de la sal.
Qué son los alimentos ultraprocesados
Existen alimentos transformados, alimentos procesados y alimentos ultraprocesados.
Los transformados son aquellos que han sufrido una modificación mínima necesaria para que podamos consumirlos con seguridad. Es el caso, por ejemplo, de la leche que ha sido tratada térmicamente para eliminar microorganismos. Es crucial no tomar nunca la leche cruda sin tratarla, ya que corremos el riesgo de sufrir enfermedades de transmisión alimentaria que pueden llegar a ser graves, como por ejemplo la brucelosis.
Los alimentos procesados son aquellos que, partiendo de una materia prima fresca o no procesada, se obtiene otro producto con una fecha de caducidad mayor. Es decir, que gracias a la transformación o procesado, se alarga su tiempo de conservación. En este grupo están por ejemplo la pasta, el pan, los quesos, el aceite de oliva, la pasta, las conservas de pescado como el atún, o las legumbres ya cocidas.
Un ultraprocesado es aquél que parte de materia prima ya procesada y al que se le han sumado grandes cantidades de azúcar, edulcorantes, grasas, almidones, sal, además de emulsionantes, colorantes, saborizantes, etc, para hacerlo muuuuy apetecible. Pero que se aleja mucho de la comida de verdad. Y si no os lo creéis os invitamos a leer los ingredientes de, por ejemplo, un yakisoba listo para comer.

Diplomada en Nutrición Humana y Dietética por la Universidad de Vic; Licenciada en Ciencia y Tecnología de los alimentos por la Universidad de Vic; Postgrado en Nutrición Humana y Dietética Materna infantil por la Escuela Universitaria de Enfermería de Sant Joan de Deu y Máster en Comunicación y Gastronomía por la Universidad de Vic.
Soy Miembro colegiada en el colegio profesional de Dietistas y Nutricionistas de Cataluña (CODINUCAT) (CAT000273).